Todas soñamos con una boda de ensueño… Y Cristina no podía querer menos, la verdad es que ella quería ser princesa, ansiaba su día como se lo noto a muy pocas novias… Quería sentirse especial, que su día fuese único! Y Pablo, su ya marido hace un año… Lo consiguió y participó, pese a ser reservado, en organizar ese día de ensueño con el que siempre soñó su preciosa mujer.
La boda se caracterizaba por detalles primaverales, decoración y menaje organizada por #endosdetalles con toques rústicos y un precioso color rosa que ambientaba todo el evento. Novia vestida de Pronovias y novio vestido de #arazgazzo le daban el toque perfecto para que el día fuese único.
La verdad, es que todo ayudaba, el entorno precioso de las Termas de Cuntis, un día maravilloso de primavera, todos los invitados expectantes a ver a la feliz pareja acudiendo al altar y unos novios super emocionados de que por fin… había llegado su día.
Cuando me sumerjo en vuestra historia, intento no sólo quedarme con lo que me contáis si no que intento saber cada detalle para que ese día no se me escape nada! Por ello después nos volvemos locos para elegir fotos… Pero siempre, siempre vale la pena.
Dos fotógrafos cubrimos el evento para no perdernos ningún detalle, yendo siempre en los dos casos al momento “casa” de los novios, ya que me parece imprescindible para un reportaje completo de vuestro día. Si no… ¿quién recoge las primeras lágrimas y las primeras reacciones a los nervios?
Ais Cristina… La novia más feliz, más princesa y la más nerviosa que he conocido en mi vida! Cuánta emoción, cuánto sentimiento… Era difícil contener las lágrimas.
¿Os cuento un secreto? Nuestra Cristina ahí como la veis de bonita y estilizada ya tenía en su barriguita a su bonita ya niña Sara.
Realizaron una preciosa boda civil en los jardines de las Termas lo que hizo muy cómodo para los invitados tener todo cerquita para disfrutar sin desplazamientos, 90 comensales que dieron lo mejor de si para crear una buena fiesta de broche final, con unos novios exultantes disfrutando de su ansiado día.
Y como no podía ser, este broche final lo acompañamos con nuestro espacio “photocall” en donde os ofrezco una cámara profesional con disparador, para que os quede un recuerdo inigualable de vuestros invitados, hechos por si mismos!
Una boda redonda, con todo detalle registrado, en la que ahora? Solo queda disfrutar de esos recuerdos que he plasmado a través de mi objetivo. Nuevamente, gracias a estos novios por haber confiado en mi para plasmar este día tan maravilloso.